La rinoplástía o cirugía de la nariz es una intervención quirúrgica destinada a modificar la forma de la nariz.
Esta indicada en pacientes que han sufrido traumatismos sobre la nariz o simplemente en personas que desean mejorar o estilizar su rostro.
La cicatriz resultante de la intervención yace dentro de la nariz por lo que no se ve. Mediante esta cirugía se puede tratar el dorso ancho de la nariz, la giba dorsal (nariz ganchuda), la punta de la misma que se puede afinar, estilizar y levantar así como la base de los orificios nasales que se pueden reducir de tamaño. Esta cirugía se puede asociar con otras cirugías faciales como la colocación de un implante de mentón para mejorar el perfil facial así como con otras cirugías faciales y corporales. En el caso de que el paciente tenga dificultades para respirar se realiza una cirugía en conjunto con un otorrinolaringologo denominada septumplastía para mejorar la respiración.
La intervención se realiza bajo sedación (neurolepto-anestesia) realizada por un anestesiólogo en quirófano con el apoyo de anestesia local.
La cirugía es de carácter ambulatorio, por lo que el paciente permanece unas 3 a 4 horas luego de la cirugía en la clínica, para luego poder retirarse a su domicilio.